Capitulo 37

Simón y Thiago duermen plácidamente y muy abrazados luego que hicieron el amor. Están pegados el uno al cuerpo del otro. Se aman y sienten que juntos han vuelto a nacer. Simoncito llora. Medio dormidos y desnudos, los dos saltan de la cama a la vez. Thiago es muy cariñoso con Simón. Le pone la mano en la mejilla y dulcemente le dice:
-- Duerme tú, mañana tienes que trabajar...
El desnudo Simón se mete en la cama. Se cubre pero no duerme. Con los brazos bajo la cabeza haciéndole de almohada contempla a Thiago en plan papá. Lo mira enamorado. El desnudo Thiago agarra en brazos a Simoncito. Es muy cariñoso con él.
--¿¿qué te pasa, mi vida?
Thiago desnudo y con un bebé es una mezcla de erotismo y ternura que enloquece a Simón. Le manda besos a su amado. Le susurra un:
-- te amo.
Thiago le guiña el ojo.
--te amo.
Le canta una canción de cuna al pequeño mientras mira con amor tanto a Simoncito como a Simón. Una vez Simoncito se ha dormido, Thiago lo deja con mucho cuidado en la cunita. Mira sonriente a Simón que ya lo espera. Simón abre las sábanas para que Thiago se meta. Se sonríen mucho. Están felices. Thiago y Simón tienen lo que siempre han soñado, están juntos y además son padres de un pequeño que los ha unido aún más. Se aferran mucho el uno al otro.
--Soy tan feliz que me da miedo –Thiago.
--A mí me pasa lo mismo. Me da miedo dormirme y darme cuenta que todo es un sueño.
Se miran fijamente. Se agarran de las manos. La voz de uno es una caricia para el otro.
--Y es que es un sueño pero un sueño real... Va a ser para siempre.
--si para siempre.
Funden sus labios en un delicioso beso. Se tocan para acabar de convencerse que la pesadilla ha acabado que están juntos y están seguros que ahora sí será para siempre.
--¿No estás tan feliz que a veces te da miedo que pase algo que lo estropee? –Simón.
--Si los dos estamos juntos nada lo va a estropear . Nada.
--Si nada... me moriría si te perdiera...
--Yo no aspiro a nada más, sino a ser siempre tan feliz como hasta ahora.
--Mi amor...
--Te amo.
Simón y Thiago se acaricia y se besan con dulzura. Simón se tumba y recibe en sus brazos a Thiago. Se van acariciando con cariño hasta quedarse dormidos












A la mañana siguiente, Simón se ducha...
--Mi amor, el desayuno –Thiago.
Thiago entra en la ducha. Le gusta ver al guapísimo Simón totalmente desnudo y mojado. Simón tiene los ojos cerrados. Le hace un gesto de conformidad con la mano. Al rato, Simón sale desnudo secándose la cabeza con la toalla. Thiago lo besa con amor pero con cuidado de no mojarse.
--ya preparé el desayuno.
Simón le sonríe divertido:
--Desde cuando sabes cocinar...?
--Desde siempre...
--¡no es verdad¡ --riendo.
Thiago le da una palmada en el desnudo trasero:
--apurate, que se te van a enfriar las tostadas...
Simón da un besito al bebé que duerme en la cuna. Thiago a su lado muy sonriente. Thiago se sienta en la cama y mira como simón se viste.
--¿no puedes apurarte? Se va enfriar lo que te preparé.
Simón y Thiago se miran y suspiran. No se cansan de acariciarse, de besarse, de demostrarse su amor. Van juntos a la mesa. Las tostadas quemadas.
--¿qué es esto?
--Es un asco, ¿verdad? –Thiago decepcionado de sí mismo.
--están hechas con amor... es lo que importa...
Simón habla con cariño pero no las toma. Se levanta. Besa a su amado.
--me basta con el café.
--¿quieres que te prepare otra cosa?
Thiago se quiere desvivir por Simón, ya que lo va a mantener, Thiago le quiere demostrar que puede ser un buen amo de casa. Simón es feliz simplemente con estar a su lado. No necesita más.
--No te preocupes... todo está bien.
Se abrazan con fuerza.
--Aún me quedan unos minutos y prefiero pasarlo con ustedes --Simón.
Thiago y Simón se están besando cuando despierta Simoncito. Simón mira la hora.
--puntual, le toca la toma.
--¡ahora le preparo el biberón¡
Tanto Simón como Thiago están sintiendo a ese bebé como hijo de los dos y a ambos les encanta ocuparse de él a partes de iguales.
--No, tú ves a levantarlo. Yo le preparo el biberón.
A los dos les gusta cuidar al bebé juntos. Thiago espera a Simón sentado en la cama con el bebé en brazos. Simón llega con el biberón que le dan con mucho amor. Thiago sale con el bebé en brazos para despedir a Simón que va al trabajo.

Simón pasa toda la mañana grabando mientras que Thiago se ocupa del apartamento y del pequeño. Espera a Simón con la comida preparada. Simón después le ayuda a fregar.
--No hace falta... debes estar cansado.
--Lo que más quiero es estar contigo...
Se sonríen y se besan. Hablan mientras Simón friega y Thiago aclara.
--¿te gusta este rol? Digo, ¿seras feliz siendo ama de casa?
Thiago le corrige divertido:
--¡soy amo de casa¡
--si, como quieras –dice divertido—pero ¿estás contento? No sé podría mirar si encuentro algo para ti en la novela ¿no te apetecería volver a actuar?
--No, la verdad es que no. Ahora sólo tengo una prioridad... tú y Simoncito. Me gusta estar en casa ocupándome de ustedes dos.
Han acabado de fregar. Simón le guiña el ojo y pícaro le dice:
--¿echamos una siesta?
Se miran con cara de degenerados. Van hacia el sofá pero ninguno de los dos tiene ninguna intención de dormir. Simón cae sobre Thiago mientras le va sacando la remera.
--te amo tanto...
Thiago le quita la remera a Simón y besa su torso desnudo.
--yo sabía que este momento iba a llegar... nos amamos desde niños. No podía ser que nuestro amor se rompiera... --dice Thiago al que a veces le cuesta creer que tanta felicidad sea cierta.
Simón mira pícaro a Thiago y le empieza a desabrochar los jeans:
--¡es hablar lo que quieres? –le dice muy sensual.
Thiago no dice nada, permite que Simón urge en su bragueta y saque su miembro que está despertándose, recobra todo su vigor con los lametones de Simón. Thiago jadea y acaricia la cabeza de su amado. Simón y Thiago, una vez más, lo dan todo por el otro. El placer de uno es el placer de ambos.